peleas, ‘desaparecido’ 132 días y en guerra con su expareja

El nombre de Juan José Ballesta (35 primaveras), conocido como El Embuste, ha vuelto a resonar en los medios de comunicación posteriormente de permanecer -o por lo menos intentarlo- alejado de los focos. Este pasado lunes día 9 de octubre ha saliente a la luz un delito del que una mujer le acusa: una presunta embestida sexual cometida durante el mes de julio en Madrid. Ha sido la misma quien ha denunciado los hechos.

El actor tendrá que personarse el próximo 7 de noviembre con su abogada, Beatriz Uriarte, del despacho Ospiga Abogados de Juan Gonzalo Ospiga, en los Juzgados de Parla para resolver y objetar a las graves acusaciones a las que se enfrenta. 

EL ESPAÑOL se ha puesto en contacto con la letrada del buró, quien ha señalado a este medio que “la señora que le ha denunciado está en un psiquiátrico y le dijo a las enfermeras que le habían violado dos personas, una de ellas Juanjo, pero que no sabía qué día, que creía que en julio porque le saltó una alerta en el móvil diciendo que había estado en Parla. Tiene un trastorno de esquizofrenia paranoide, en los informes consta que tiene alucinaciones auditivas, que escuchaba voces, y que tenía un elevado consumo de cocaína y heroína”.

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El que fue el cuarto intérprete más imberbe en percibir el Premio Goya a mejor actor revelación en el año 2001, con tan sólo 13 primaveras, por su papel en el exitoso film, se ha conocido implicado en numerosas ocasiones en problemas con la autoridad y ha protagonizado diversos altercados.

Conflictos

En una entrevista dada a varios medios de comunicación en 2005, el nacido en Parla aseguró sobre la película El Embuste: “Cuando leí el guion, me dije: ‘¡Esta historia es como las que pasan en mi extrarradio… voy a ser como El Torete!’. Y no, no me resultó mínimo difícil hacer este papel, porque en mi extrarradio pasan las mismas cosas que en la película… o sea, que si le haces el lío a alguno, te ganas un palazo“.

Un año posteriormente, con 18 primaveras, recibió su primer “palazo”. Durante las fiestas veraniegas de la billete toledana de Borox, diez individuos le golpearon en repetidas ocasiones. Una paliza que terminó con la pérdida de conocimiento, un pómulo destrozado, dos costillas y dos dedos rotos. “Llegaron las pibas, me empezaron a pedir autógrafos, yo se los di, y de repente vinieron los chavales esos y me dijeron que iba de chulo, quitándoles las novias. Y que era un maricón. Y cogieron y me pegaron. Me pillaron a mí solo y me dieron un palizón. Me reventaron un pómulo, me caí de espaldas, me dieron un patadón en la cara y perdí el conocimiento. Entonces se cebaron. Me partieron una costilla y dos dedos. Un policía me sacó del mogollón”, contaba Ballesta a El Mundo.

La cosa no quedó ahí. Las peleas continuaron y empezaron a ser una constante en su vida. En una discoteca de Illescas sufrió otra embestida por ser identificado como El Embuste. “En Illescas asimismo tuve movida, firme. Estaba en una discoteca, en el baño, meando. Entró uno y me dijo: ‘¿Tú eres el de El Embuste?’. Yo le dije que esperase, que estaba meando. ‘¿Pero eres el de El Embuste o no?’, me repitió. Y le dije que sí, y entonces me arreó un castañazo. Me dio una cacho de hostia. No me dio ni tiempo a ir a por él. Entró otro, y otro, y otro. Aguanté todos los palos, pero me dejaron la cara bonita, y el cuerpo, destrozado“, decía a dicho medio. En Getafe asimismo tuvo un altercado, donde le amenazaron con una cortaplumas. 

Aunque sus embolados no sólo se formaban mientras estaba fiesta, asimismo cuando conducía. Ese mismo 2006 estrelló su Audi: “Me metí una bofetada, sí. Frené en una curva, había agua, y se me fue el coche de costado, firme. Lo siniestré del todo. Me dio una pena…”. En 2021, asimismo se le relacionó con otro incidente en carretera: iba en un coche con sus amigos a 180 km/h cantando y bromeando sobre que a esa velocidad se iban a matar. Subió un vídeo a las redes sociales por el que posteriormente pidió perdón.

‘Desaparecido’ durante 132 días

A mediados de 2022, todo el mundo se preguntaba dónde estaba Juan José Ballesta. Dejó de objetar al teléfono y de imprimir imágenes en las redes sociales. El software Socialité llegó a afirmar que había desaparecido. 

Estuvo durante 132 días sin dar señales de vida, sólo su círculo más íntimo conocía su paradero y si se encontraba aceptablemente. La sinceridad era que se encontraba inmerso en su nuevo tesina y quería mantenerse lo más alejado posible de la esfera pública. EL ESPAÑOL contactó con Doble M Talent Agency, su agencia de representación, que negaba rotundamente las informaciones que se estaban dando, asegurando que se encontraba aceptablemente y localizado. “No está desaparecido. Nos está llamando mucha masa y esto sólo hace que preocupar a sus familiares. Juan José está volcado en su nuevo tesina profesional y por eso está un poco alejado de todo, porque lo más importante para él ahora es este trabajo”, aseguraban a este medio.

Su primera aparición cinco meses posteriormente del escándalo en televisión fue en Pasapalabra, y sorprendió su cambio de imagen. “He cogido 20 kilos, entrenando y con la dieta”, apuntó, y recalcó: “Me caldo egregio la éxito. No podía salir a la calle. Iba a los centros comerciales y la masa se asomaba a los pasillos a helminto, la masa me perseguía, me echaban fotos sin preguntar. Era como que quería ser una persona regular y no podía serlo”.

La custodia de su hijo

Juanjo ha vivido desde pequeño rodeado de conflictos, sin confiscación, el moretón más duro al que se enfrentó fue la ruptura a principios de 2021 con la que fue su pareja y su gran bienquerencia durante 15 primaveras, Verónica Mesto.

Antaño de que se mascara la tragedia y todo terminara en una combate abierta, uno y otro dieron a luz a Juanito, su primer y único hijo en global, en 2007. Desde entonces, el pequeño de ahora 15 primaveras ha sido la alegría de sus vidas y el pegamento que los mantuvo unidos hasta que el bienquerencia se acabó. 

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“Pase lo que pase, y por mucho que me intentaras hacer daño, yo soy yo y tú, la mujer de todas mis vidas, Vero. Nunca lo olvides, pase lo que pase y aunque no tengas razón, siempre estaré para ti y para los tuyos”, publicaba el actor en las redes.

Estas palabras no le sentaron mínimo aceptablemente a la imberbe, y no tardó en sacar a luz las condiciones de su separación en relato a  custodia de su hijo: “No creo que decirte que pases manutención posteriormente de un año y medio separados sea hacer daño. El inmaduro vive conmigo, pero el padre tiene obligaciones. Trabajo en dos sitios para que me llegue para la casa, luz, agua, comida, gastos de tu hijo menos. Como no tenemos convenio regulador hecho te aprovechas de eso y me dices que hasta que no lo diga un magistrado no me das mínimo. No sé ni cómo tienes vergüenza de poner esas cosas sabiendo que no me voy a mantenerse callada… Así que no me hagas explotar, que eres un inexacto“.

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