Se pasión Terry Gene Bollea, pero todo el mundo le conoce como Hulk Hogan ―un sobrenombre que le ha ocasionado una ardua batalla reglamentario durante abriles con Marvel Comics por la remisión a su superhéroe verde―. En las décadas de los ochenta y los noventa vivió su momento dorado como perseverante profesional de la World Wrestling Entertainment (WWE), de donde fue expulsado en 2015 por comentarios racistas. Al parecer, se filtró la compacto de una conversación a los medios estadounidenses en la que Hogan utilizaba en varias ocasiones la palabra nigger para referirse despectivamente a los negros. En 2018, sin requisa, la WWE decidió readmitirlo. “Esta segunda oportunidad surge tras numerosas disculpas públicas y trabajos voluntarios con jóvenes, a los que enseña a estudiar de sus errores. Esos esfuerzos le han llevado a la comienzo de nuevo al Salón de la Triunfo”, explicó la asociación estadounidense de lucha expedito. El pasado 11 de agosto, la cartel de la lucha expedito cumplió los 70 abriles y parece que, ahora más que nunca, sigue en su empeño por redimirse de su pasado y mirar cerca de el futuro.
Este miércoles 23 de agosto, varios medios se hacían eco de una entrevista con Muscle and Health en la que Hogan deje abiertamente de sus adicciones, la mayoría causadas, según relata, por las consecuencias físicas de su profesión. “Me estuve hinchando a pastillas para el dolor porque había tenido que soportar 25 procedimientos quirúrgicos, incluidos 10 en la espalda, operaciones faciales por patadas, reemplazos de rodilla y cadera y cirugías abdominales y de hombro”, explica el perseverante de dos metros de valor. “Hubo un periodo de tiempo, hace unos cinco o seis abriles, en el que tenía un dolor perturbado en la medida en que ni siquiera podía funcionar”, cuenta.
Durante sus 35 abriles de carrera en la lucha expedito ―la última vez que se subió oficialmente al ring fue en 2012― Hogan logró 12 reinados como campeón mundial, pero igualmente recibió los golpes suficientes como para que los analgésicos se convirtieran en una parte fundamental de su día a día. Estaba tan acostumbrado a ellos que, incluso retirado, los seguía necesitando. “Necesitaba medicamentos para el dolor en esa etapa, eso es seguro. Pero una vez que las cosas comenzaron a calmarse, continuaron dándome los mismos medicamentos. Llegué a un punto en el que me recuperé de la décima cirugía de espalda, pero la botica me llamaba y me decía: ‘Su récipe está nómina’, y como un perro persiguiendo un hueso, iba a recogerlo”, confiesa ahora el perseverante nacido en Georgia (EE UU). “Entonces, finalmente, me miré a mí mismo y dije: ‘No tengo dolor. No necesito esto. Me duele el cuerpo por todas las lesiones de lucha expedito, pero no siento ese dolor insoportable con el que no puedo proceder”, detalla orgulloso. Ahora, asegura, mitiga su dolor y optimiza sus entrenamientos mediante el uso de CBD, el químico no intoxicante que se encuentra en la planta de cannabis.
El licor, según reconoce en la entrevista, igualmente ha sido un duro oponente que lo ha acompañado a lo dispendioso de su carrera profesional, pero al que finalmente ha conseguido derrotar. “He practicado mucho bebiendo porque luché durante unos 40 abriles y esos tipos toman cerveza a menudo. Pero hace unos siete meses decidí no absorber más licor. Estaba en una fiesta de Nochevieja y vi un montón de cosas que no aprobaba ni me gustaban. Me vi a mí mismo en este entorno y dije: ‘¿Sabes qué? No sé cómo llegué aquí, pero ya terminé”, comenta Hogan, quien asegura que dejar el licor igualmente ha frenado su apetito por tomar comida basura por la oscuridad. Sin requisa, mantenerse sobrio igualmente le ha privado de la aprobación de algunos de sus colegas de profesión: “Hay ciertos luchadores que me miran a la cara y dicen: ‘Si no tomas una copa conmigo, no eres mi amigo’. Bueno, soy tu amigo, pero no voy a absorber contigo. ¿Qué vas a hacer al respecto?”, admite en Muscle and Health.
Hogan parece tener la firme intención de copar ahora los titulares como un referente de conducta ejemplarizante, que reconoce sus errores, los afronta y los supera. Pero no siempre fue así. Su vida ha poliedro tanto que musitar que, próximamente, Chris Hemsworth interpretará al perseverante en un biopic dirigido por Todd Phillips que, de momento, no tiene aniversario de estreno. Su nombre fue especialmente sonado en 2012, coincidiendo con su retirada de los rings, cuando se filtró un vídeo sexual en el que aparecía teniendo sexo con Heather Clem, esposa de su amigo DJ Bubba Clem. Según el perseverante, Bubba lo había incitado a tener relaciones sexuales con Heather sin avisarle de que estaba siendo estampa por una cámara de seguridad. Aun así, no denunció a su amigo (o examigo), sino a Gawker, la web que distribuyó las imágenes. El veredicto final resultó en que el blog especializado en destapar las intimidades de los famosos indemnizaría a Hogan con 100 millones de euros por estrés emocional y perjuicio profesional y a su imagen pública. Gawker se declaró en bancarrota y cerró.
El daño de la imagen pública de Hogan, aun así, no se recuperó y no fue tanto por las imágenes del vídeo sexual, sino por los comentarios homófobos que se escuchan en la compacto. “Resulta que en mi casa antigua ahora vive un marica, pero debía de ser medio marica porque parecía estar enamorado de mi mujer”, se le oía comentar. En esa época, Hogan estaba casado con Jennifer McDaniel, de 49 abriles, con quien contrajo desposorio en 2010 y de quien se divorció en 2021. Calibrado antaño de esa relación, el perseverante estuvo casado con Linda Marie Bollea, de 63 abriles. El desposorio duró desde 1983 hasta 2009 y la expareja comparte dos hijos en popular, la cantante Brooke Hogan, de 35 abriles, y Nick Hogan, de 33. Los cuatro protagonizaron en 2005 Hogan Knows Best, una serie de telerrealidad que se centraba en la vida habitual del perseverante profesional.
Si la soltería le duró poco a posteriori de su primer divorcio, no ha sido mucho más la segunda vez. A finales del pasado mes de julio, Hogan volvía a ser notificación tras anunciar su compromiso con su nueva novia, Sky Daily, de 44 abriles. Su compromiso comenzó a principios de 2022, a posteriori de que coincidieran, precisamente, en una boda. “Le pedí a Sky que se casara conmigo y ella estaba lo suficientemente loca como para proponer que sí”, afirmó la suerte del wrestling en declaraciones recogidas por Los Angeles Times.
En este momento, Hogan está disfrutando de la vida en la playa, tocando el bajo por diversión cuando su hija Brooke le turista, trabajando en sus coches ―tiene una gran colección de vehículos― y “festejando duro y sobrio”, según ha contado en su nueva entrevista. “La vida es buena”, reconoce. Dos días a posteriori de su septuagésimo cumpleaños, compartió una foto en Instagram en la que posa con su nueva prometida en un momento poliedro de la celebración. El texto que la acompaña demuestra que encara esta nueva división de su vida sin analgésicos ni licor, pero con más ganas que nunca: “¡70 abriles, novato y más acertado de lo que nunca he sido!”. El perseverante se ha cansado de pelear y ahora está en su etapa más pacífica.