¿Es posible que, desde hace más de 30 primaveras, Winona Ryder y Keanu Reeves estén casados?
No, no hemos perdido el discernimiento. Todo tiene una explicación y, si eres fanático de la mítica ajuste del ‘Drácula’ de Bram Stoker, dirigida por Francis Ford Coppola en 1992, esta divertida peculiaridad puede que te alegre el día.
Según compartía Coppola en una entrevista para los materiales complementarios del DVD de la película, la boda entre Mina y Harker (los personajes de Ryder y Reeves) tuvo que grabarse en una iglesia griega ortodoxa de Los Ángeles. Toda la ceremonia que fue grabada estuvo conducida por un un ministro legítimo rumano vivo.
Tiempo a posteriori, reflexionando sobre el rodaje de la ámbito, Winona Ryder y Keanu Reeves se dieron cuenta de que, tal vez, dejando de costado el plano justo del asunto, estuvieran casados frente a los “luceros de Altísimo”.
“Hicimos una toma completa de una ceremonia de nupcias con sacerdotes reales“, comentaba Keanu Reeves en una entrevista con la revista Esquire. “Winona dice que lo somos. Coppola dice que lo somos. Así que supongo que estamos casados frente a los luceros de Altísimo“, aseguraba el intérprete.
Desde aquella experiencia, el propio Reeves ha confesado que suele aceptar mensajes de su compañera de reparto diciéndole: “Hola, marido”. Poco que entreambos parecen aceptar de buen escalón.
Tiempo a posteriori, hablando en 2018 con The Guardian, el director de ‘El Padrino’ además hablaba de este momento y aseguraba que todo era cierto. “Esto es conveniente vivo y creo que muy hermoso, porque positivamente hicimos la ceremonia y tuvimos al sacerdote oficiándola.”
“Así que, en cierto sentido, cuando todos terminamos, nos dimos cuenta de que Keanu y Winona positivamente están casados como resultado de esta ámbito y esta ceremonia”
En el mismo año, hablando con Entertainment Weekly para promocionar otra de sus películas juntos, ‘La boda de mi ex’, Ryder apuntada: “Grabamos el plano master y él [el sacerdote] hizo todo el proceso. Creo que estamos casados.”
“¿No te acuerdas de eso?“, le preguntaba Ryder a Reeves. “Fue el día de San Valentín. Dijiste ‘sí, quiero’.”
En el año 1890, el novato abogado Jonathan Harker (Reeves) viaja a un castillo perdido de Transilvania, donde conoce al conde Drácula, que en 1462 perdió a su coito, Elisabeta. El conde, fascinado por una fotografía de Mina Murray (Ryder), la novia de Harker, que le recuerda a su Elisabeta, viaja hasta Londres “cruzando océanos de tiempo” para conocerla. Ya en Inglaterra, intenta conquistar y seducir a Lucy, la mejor amiga de Mina.
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Manuel es entendido en cine, series y televisión. Especializado en crítica cinematográfica, llegó a Fotogramas en 2022, donde cubre diariamente la hogaño de la industria franquista e internacional.
Desde muy pequeño, el cine y el teatro fueron su pasión. Imaginar historias, verlas y leerlas, acabó por convertirse en su inclinación. Por ello, se trasladó desde su ciudad originario, Oviedo, hasta Madrid en 2015 para estudiar Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III de Madrid e Interpretación en el Estudio Corazza para el Actor. Unos primaveras más tarde, tras finalizar entreambos estudios, realizó el Máster en Crítica Cinematográfica de la ECAM. Poco a posteriori de obtener su diploma, imaginando un futuro en el que la recital y la escritura pudieran coexistir en su día a día, llegó a la redacción de Fotogramas, donde se ha dedicado de empachado a crear contenido de lo que más le apasiona. (‘Harry Potter’ es su perdición y cualquier ocasión es buena para reflexionar e indagar sobre su apasionante universo).
Como buen miembro de la Concepción Z, está al tanto de las tendencias que se cuecen en las diferentes redes sociales y es consciente del impacto que estas provocan en la audiencia: ya sea para revocar o impulsar proyectos y celebrities. Y, por consiguiente, los cambios en los intereses de los lectores más jóvenes de la publicación. Netflix, HBO y Disney+ son sus aliados más acérrimos y no duda en dedicarles sus horas y su compañía, para poder a posteriori balbucir incansablemente con los lectores de la revista.