GRANADA.- La cena de gala organizada por los reyes de España, Felipe VI y Letizia, para los líderes europeos reunidos en Granada en una cumbre que se centró en la crisis migratoria, estuvo marcada por un momento incómodo protagonizado por la reina debido a un fallo de protocolo.
En la icónica Alhambra (el complejo monumental de palacios, jardines y fortaleza), mientras estaba parado frente a un micrófono con una copa en la mano, Felipe VI dio inicio al brindis con los líderes europeos presentes en el evento. Mientras el rey expresaba: “Me gustaría brindar por todos ustedes. Gracias por estar aquí”, la reina notó que no tenía una copa y trató de avisar discretamente al personal de protocolo para que le trajera una. Sin embargo, no tuvo éxito.
En ese momento, y para superar la situación incómoda, Felipe VI le ofreció su propia copa a su esposa, y finalmente brindaron juntos.
Antes de este incidente, Felipe VI elogió a Granada (en Andalucía), describiéndola como “una ciudad magnífica de la que espero que haya inspirado este encuentro”. Además, destacó que Granada es una ciudad “orgullosa de su historia, que se ha convertido en un ejemplo único de fusión cultural en Europa”, y mencionó que su característica más destacada es la Alhambra.
La crisis migratoria, uno de los temas más espinosos entre los miembros de la Unión Europea (UE), fue uno de los principales enfoques de esta cumbre informal, que tuvo lugar en medio de una nueva ola de personas que llegan a la isla italiana de Lampedusa, generando tensiones en el bloque.
Agencias AFP y AP