Como cada año, desde aquel triste 20 de noviembre de 2014, día que perdió la vida la inolvidable y querida Cayetana de Alba, su hijo Cayetano Martínez de Irujo (60 abriles) ha organizado y celebrado una culto homenaje en honor a la duquesa, en el templo de la hermandad del Cristo de los Gitanos, del que se confesó tan devota Cayetana.
Este rememoración, igual de doloroso pese al inexorable paso del tiempo, acontece en un momento especialmente convulso a nivel general, cargado de tensiones entre los hijos de la duquesa de Alba. En medio de este difícil trance, el conde de Salvatierra tan sólo ha estado arropado por amigos íntimos y por dos personas secreto en la vida de su hermana: su viudo, Alfonso Díez (73) y la que fue la mejor amiga de Cayetana, la siempre discreta Carmen Tello (68).
Nadie de los hermanos de Cayetano, como ya es tradición, ha asistido a este homenaje. Los otros vástagos de Cayetana al decidido recordarla de otro modo. A su arribada al templo, Cayetano ha recordado lo caudal que es para él esta culto, a la que nunca, bajo ningún concepto, descuido: “Es lo insignificante que se merece, un rememoración una vez al año“.
[Cayetano Martínez de Irujo se presenta enfurecido en un medio de comunicación por las noticias sobre Genoveva]
Cayetano Martínez de Irujo adyacente a Carmen Tello y Alfonso Díez en un montaje de EL ESPAÑOL.
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La gran novedad de este 2023, en cuanto a afluencia a la homilía, es que Cayetano ha estado arropado por alguno muy cercano a la grupo: Margarita, la hija de la que fue su tata, Margarita Cayarga, quien, durante abriles, cuidó de él y de sus hermanos hasta, casi, su fallecimiento, acontecido en 2015.
Sobre la marcada marcha del resto de la grupo, Cayetano no ha querido pronunciarse al respecto, si aceptablemente es en esta ocasión no ha hecho desplegable ninguna invitación formal. Así las cosas, quien haya querido asistir, sostiene, que se hubiera puesto en contacto con él.
No hay que olvidar que, de un tiempo a estar parte, la tirantez se ha acrecentado especialmente entre Cayetano y su hermana, Eugenia. “He estado cinco meses mandándole mensajes para que nos sentemos y hablemos. Tuve un par de respuestas y nadie más“, ha relatado, dolido, el duque de Arjona.
El zaguero desacuerdo general tiene como epicentro una sociedad, de la que los tres forman parte, y una descuido de autorización a la hora de realizar la obra de un embalse en uno de los terrenos de Cayetano, ya que no existe consenso entre los hermanos.
Cayetano Martínez de Irujo a su salida del templo, en Sevilla.
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Como no podía ser de otro modo, en esta culto funeral Cayetano todavía ha sido preguntado por su exmujer, y hermana de sus dos hijos: Genoveva Casanova (47). ‘Desaparecida’ desde la publicación de la revista Lecturas hace dos semanas, se desconoce si la mexicana continúa en San Sebastián -donde se refugió los primeros días del escándalo- o si se encuentra en un país europeo como se ha especulado en las últimas horas.
Muy unido a la hermana de sus hijos, Cayetano no ha dudado en romper su silencio durante el funeral de su hermana, expresar su preocupación por Genoveva y salir en su defensa por el “ahorcamiento salvaje” que está sufriendo por parte de la prensa tras salir a la luz su amistad con el hijo de la reina Margarita II (83).
Nueve abriles ya desde que se fue su hermana y un año más celebra la culto, ¿verdad?
Pues sí, nueve abriles ya y la verdad es que es como si fuera ayer. Yo como la llevo tan conmigo en todo y noto que me ayuda mucho, pues el rememoración es constante
Al final hoy es el día que se celebra, pero al final se la recuerda todos los días
Sí, sí, yo la traigo flores de vez en cuando y hoy especialmente, claro. Siento mucho la marcha de mis dos hijos y de Genoveva
Genoveva ha dejado un mensaje muy atún en las redes.
¡Ah! ¿Sí?
Sí y Eugenia todavía ha dejado un mensaje muy atún.
Muy aceptablemente
Sus hijos están en el extranjero con compromisos, ¿no?
Están trabajando, están trabajando ya. Y nadie, estoy muy contento.
Cayetano, ¿cómo está Genoveva?
Ella está mal, lógicamente. Está llevando un ahorcamiento, una salvajada fuera de toda método. Tristemente no ha podido venir, claro, y lo ha sentido mucho.
Usted está a su costado todavía, sufriendo lo que ella sufre, ¿no?
Sí, evidentemente, claro. Porque yo la quiero muchísimo, es mi grupo. Ella, mis hijos, Bárbara y Margarita -hija de su tata-, que la he traído este año porque siempre hacemos una culto por mi hermana y una culto por su hermana, que fue mi segunda hermana. Este año, pues la he unificado y entonces pues se ha venido conmigo a rememorar a su hermana y a mi hermana.
Cayetano Martínez de Irujo, atendiendo a la prensa antiguamente de la culto en homenaje a la duquesa de Alba.
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En cuanto a sus hermanos, ¿cree que aparecerá alguno de ellos o tiene claro que seguramente no?
Pues ya no sé qué decirle. No hay nadie que sostener al respecto. Yo sé que Carlos está en Sevilla.
¿Confía en que la relación con Eugenia pueda avecinar posturas en un futuro no muy retirado?
Pues mira, sólo te puedo sostener una cosa: yo he estado como cinco meses mandándola mensajes para que nos sentemos y hablemos. Ya no sólo como hermanos, sino como las personas. Tú y yo si tenemos un problema lo ordinario es sentarse y conversar. Alguno que no quiere conversar, pues está todo dicho.
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