Uno de los involucrados en el escándalo, Augusto Bravo, ha sido el único que se ha mantenido en silencio. A pesar de que la actriz Adianez Hernández, su esposo Rodrigo Cachero y la exnovia de Bravo han hablado públicamente sobre el romance extramarital, Bravo se negó a hacerlo cuando fue captado fuera de su negocio de pollos rostizados que comparte con su familia. Esta actitud ha sido ampliamente criticada, ya que no respondió a la solicitud de la conductora de asumir la responsabilidad de sus acciones.
La semana pasada se dio a conocer públicamente que Rodrigo Cachero y Adianez Hernández habían terminado su relación de 10 años, de los cuales habían estado casados durante cinco años. Sin embargo, los motivos de la separación no se revelaron en ese momento. Fue hasta que la exesposa de Cachero, Larisa Mendizábal, confirmó los rumores de la infidelidad de Hernández con Bravo, que se hizo evidente lo que había sucedido.
Cachero fue el siguiente en hablar, pidiendo respeto para sus hijos compartidos con Hernández. Expresó su molestia por los comentarios negativos que algunas personas habían dejado en las redes sociales de los niños. El actor quiere proteger a sus hijos en esta situación complicada, ya que imaginaba un futuro junto a Hernández, a quien conoció durante el rodaje de una telenovela en la que ella actuaba y él era el director de actores.
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Ayer por la mañana, Hernández rompió el silencio y explicó por qué desactivó los comentarios en sus redes sociales. Reconoció que había cometido un error que afectaba no solo a ella, sino también a su familia y al padre de sus hijos. La exparticipante de “Survivor” admitió que su comportamiento no fue adecuado al engañar a su esposo, pero afirmó que estaba motivada por el enamoramiento que sentía por Bravo, a quien conoció debido a su relación con la exesposa de Cachero. Además, pidió a los demás involucrados que asumieran su parte de responsabilidad en lo sucedido, insinuando que su esposo también había descuidado la relación.
“Ventaneando” esperó a Bravo afuera de su negocio de pollos rostizados, y aunque él sí habló con la reportera, pidió que la conversación fuera sin cámaras. Argumentó que no era una figura pública y no estaba obligado a hablar. Sin embargo, la reportera siguió a Bravo cuando salió del negocio y lo interrogó acerca de su versión de los hechos, tal como Hernández había pedido.
Daniel Bisogno, quien afirma ser amigo cercano de Bravo, ha declarado que Hernández y Bravo siguen juntos.
melc